Escena de diciembre. Preguntas

-Ma, ¿cuándo vamos a la feria? ¿La noria va a ser grande?- preguntó Noe mientras hacia picar el balón;- y quiero la nube amarilla como la de Jose. 

Se calló. Ana seguía con la mirada fija en la pantalla y una taza de café en el escritorio improvisado de la sala.


El sol de diciembre, tibio, agradable dibujaba los rayos desde el patio interior. Y el único ruido era el tac, tac del balón.

-¿Cuándo vamos a poner el árbol de Navidad?- seguía Noe sin mirarla como si hablara consigo mismo.- Quiero ir al parque con Jose y Fran.
Se tiró en el sillón mientras las teclas se acompasaban con el reloj de pared de la abuela. Y de pronto soltó:
-¿Viene la abuela hoy?

Ana dejó de teclear. Se levantó y se sentó a su lado. Él se acurruco con la manitas firmes y seguras rodeando la figura, mientras Tibi observaba cerca de la calefacción.
-Tesoro, la abuela está en el pueblo, no puede venir, ya te lo dije. Pero la verás por video conferencia en cuanto pase la tormenta. 
-Si, pero hace mucho, ¿todavía está cerrado?
-Lo siento Noe, creo que estaremos mucho tiempo así y no debes estar triste. Espera que termino una plantilla y salimos a dar una vuelta con Tibi. ¿Te parece bien?
-Sí, pero necesito un móvil para hablar con Jose.

(Que sea por poco tiempo y poder disfrutar otra vez de sus risas y juegos en el parque.) 





Comentarios

  1. Ojalá sea por poco tiempo, pero me parece que vamos a estar así por lo menos un año más.
    Yo creo que a alguien le viene bien tener a europa confinada.
    Besisimos.

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    1. Supongo que en el fondo ningún ciudadano de a pie tiene ni pajolera idea de lo que sucede y porqué.
      Eso es de por sí una enorme y tenebrosa incógnita que ni los niños ni los demás se merecen.
      Besisimos

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  2. Me produce una mezcla de tristeza, ternura y me queda poco espacio para la esperanza.

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    1. De momento hay escasez de espacio, sí. Pero no debemos preocuparnos, la
      digitalización ya se está ocupando de ello para crear esperanzas renovadas.

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  3. No sabemos nada, nadie lo sabe, vamos dando palos de ciego mientras unos mueren y otros enferman de por vida. Acabamos siempre recurriendo a la paciencia pero la tienda donde la venden ha cerrado por la pandemia. Un abrazo

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    1. Qué bueno Ester, "siempre recurriendo a la paciencia pero la tienda donde la venden ha cerrado por la pandemia."
      Guau, abrazos

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  4. Qué triste... Cómo se ha llegado a esto y por qué.
    Es que has dejado un resumen con acentos justo ahí...
    Tq

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  5. Y que escenificacion (qué pasa con los móviles, no conoces los acentos)
    Grande ...

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