Viejo verde o incauto o suicida muchacha imberbe

 Hay días que estoy donde mis pensamientos

La clase de historia. Tercer curso. Mañana de invierno.

Era el primer año que Mara estaba con nosotros. Un monumento sueco  de revista retocada al natural, una experiencia nueva no sólo  para la clase sino para el colegio. 

Mara era un referente sexual y místico que ya no estaba en la imaginación sino caminando y hablando entre nosotros. El centro del huracán, un sunami de hormonas adolescentes. La desazón  y algo más de las chicas que sólo podían subcompetir en la atención y los chicos fanfarrones de lejos. 

No era de estudiar y buscaba notas a su estilo. 

Pudo sentarse adelante donde parecía un bastión sueco ondeando su bandera. 

Cambió el uniforme que se transformó en un vestido ajustado y corto. 

Los profesores seguro que disimulaban indiferencia por "ley", pero Pablo Hernández de historia era débil. 

Pequeño, regordete de unos 50 años con calva y gafas. Todo un desastre para tener delante suyo un terremoto frío, rubio que jugaba con sus pequeños ojos abriendo disimuladamente las piernas con un arte que odiaban los otros profesores temerosos de ser seducidos. 

Cuatro días a la semana tenía que soportar don  Hernández el calvario, en una lucha tiránica por mirar sin ser detectado. Por la mente histórica que no era capaz de detener el proceso de la mirada y la dureza escondida detrás del escritorio. 

Salía derrotado entre relatos de batallas, de gobiernos, de dictaduras, de pactos que no volverían a ser recordados. Salvo la guerra vikinga y un Mozart con sonrisa socarrona y taimada. 

Comentarios

  1. La primera ópera a la fui fue las valkirias. Era larga y hubiera escuchado 4 horas más.
    Nunca podría competir con una mujer de las características que describes y no me extraña que el profesor de historia perdiera la guerra
    A ver cómo sigue...
    Besisimos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Seguramente una víctima de un episodio imprevisto... algo que nunca pudo imaginarse. A ella le quedaba poco para cumplir los 18, pero parecía mayor aún.

      Era y es una chica maravillosa, super cariñosa, casada ya con dos hijos preciosos y un zoo. Su pareja, de menor estatura, muy delegado, un palito e intelectual, a pesar de lo que dicen las malas lenguas, no es rico. 😁


      Uf para ir a ver una ópera de Wagner hay que llevar un colchón. Para mí un genio, pero menos de tres horas nada.
      Un innovador, antitemas, controvertido en la música, en su creatividad. Una biografía muy rica de una vida fuerte y en mi menor, me encanta el mi menor.
      Besisimos

      Eliminar
  2. Un amigo me decía que esas chicas tan guapas de las películas y las revistas las guardaban en algún lugar porque nunca vio a ninguna en la calle. Yo tampoco me he encontrado por la calle con ninguno de esos modelos guapetones, Abrazucos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Uf, las hay y desgraciadamente, aunque no se crea, lo pasan muy mal, siempre son el centro desagradable que no desean y viven bastante encerradas. Es increíble. Puede ser por eso que se vean menos.
      Abrazucos

      Eliminar
  3. jjajajajajajajaj solo voy a agregar vulgarmente "la carne es débil" jajajja y supongo que a los profesores muchas de estas situaciones les deben costar bastante de remar jajja convengamos en que no solo se trata de bellezas, sino que también hay actitudes provocativas en las niñitas inocentes jajajja

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad que en ella era una actitud entrañable que provocaba más efectos, aparte del profe: el furor de las otras que no tenían nada de inocentes y el concentimiento cómplice de los varones. Y por supuesto las caras circunspectas de los otros profes. 😁

      Eliminar
  4. 10 de abril hace 90 años, murió Khalil Gibran a los 48.

    https://1.bp.blogspot.com/-itzxfNgHvbg/YHEP4upxrbI/AAAAAAAAC20/WEAGbpEzo-I0DWLKQikoQwgesUBAxZoZQCLcBGAsYHQ/s0/Gibran%2B-%2BPalabras%2Bdesocupadas.jpg

    ♡ Por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nubes.
    ♡ No busques al amigo para matar las horas, sino búscale para vivirlas
    ♡ Si revelas tus secretos al viento, no culpes al viento por revelarlos a los árboles.
    ♡ Si de noche lloras por el Sol, las lágrimas no te dejarán ver las estrellas.
    ♡ No olvides que la tierra se deleita al sentir tus pies descalzos y los vientos anhelan jugar con tu cabello.
    ♡ Cuando el amor te llame, síguele, aunque sus caminos sean difíciles y escarpados. Y cuando sus alas te envuelvan, cede a él, aunque la espada oculta entre sus plumas pueda herirte.

    ResponderEliminar
  5. Sin querer añadir ni una coma a tu fascinante historia en la que, sin querer, he compadecido a D. Pablo Hernández si voy a estar de acuerdo con uno de tus comentarios. Con el paso de los años hablo con “amigas de toda la vida” que “entonces” (y ahora) eran espectaculares y nos tenían encandilados a todos los chavales de su edad que no sabíamos ni siquiera como acercarnos a ellas porque nos parecía que estaban en la cima del monte y nosotros no habíamos ni empezado a escalarlo. Pues, bueno, con el paso de los años me dicen que “entonces” vivían traumatizadas, no por ser guapas, no, por creerse altas, o bajas, o por tener demasiado pecho, o poco, o por ser rubias o morenas, o tener no sé qué en los dientes, o por cómo vestían, o por cómo andaban. Y les miro y les digo cómo nos parecían a nosotros y nos reímos y seguimos tomando un café, amigos, cómplices, la vida pasa.
    Wagner otro día.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cierto, nadie podía comprender todo lo que pasaba esta niña , incluso acoso, salir era una odisea, hasta su madre sufría al acompañarla. No tenía amigas, en su caso la única fui yo y tuve la suerte de conocerla a fondo a través del tiempo.
      Entiendo a tus compañeras, ojalá te hubieses acercado a ellas. Pero nunca es tarde y al final te diste cuenta.

      Eliminar
  6. En una situación similar alguien, que no disimulaba en eso de mirar sin mirar, me dijo claramente: ciertas cosas están hechas para ser contemplandas.

    Algo de razón llevaba..

    Woody Allen te saca de ahí cinco películas ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí , me imagino que era imposible dejar de mirarla, porque realmente parecen exclusivas, no pueden evitar llamar la atención. Lo del profesor es lógico. Ves, eso sería interesante, qué pasaba en él, por él.
      El problema radica en estos casos que es una persona, una adolescente, no un objeto que se suele confundir y sufren.

      Jajaja, me imagino a Allen. Él hasta podría ser el profesor en un debate consigo mismo.

      Eliminar

Publicar un comentario