Buenos días Don Miguel Ángel

Pintura Miguel Angel Martínez

-Buenos días Luz 
-Qué le pasa que está con ese humor...
-Nada que no sea producto de esta época. Fíjate en La catedral del gótico del siglo XII (Reims),


cuando llegaron y la incendiaron el 19 de septiembre de 1914 a las cuatro de la tarde. 

-Y con eso qué...
-Pues nada, lo que la imagen nos enseña es lo que casi nunca deseamos ver y tratamos siempre de ocultar. 

Seguí con un gesto de intriga y entonces me fue aclarando. 

-Te cuento, hace unos días acudí a mi cita al recinto habilitado para la vacunación correspondiente contra el Covid-19. Nada más llegar observé como una inmensa caravana de coches ocupados por una o dos personas “mayores” iban aparcando en las inmediaciones. 

Observaba con asombro cómo iban descendiendo de sus vehículos personas de aspecto “gris”, sin expresión en su mirada, muchos arrastrando los pies como si se les hubiera olvidado caminar, que en silencio se incorporaban a la masa humana en busca de la vacuna obligatoria que remediase milagrosamente el mal que no tenían.

La cosa no acabó con aquella “visión zombi”… Observé cómo una mujer se acercaba a un celador diciéndole que al día siguiente le tocaría a ella vacunarse pero que como tenía “graves patologías previas” su médico de cabecera le aconsejó que lo consultase antes con el médico que le correspondiese en el centro de vacunación. 

A medida que accedía al lugar de vacunación, en columna paralela, observé cómo dicha señora explicaba a un “alguien”, que en su espalda llevaba el cartel de “Médico”, apostado como en la barra de un bar en el puesto de información y que parecía escuchar los lamentos de la señora… Hasta que observé que la mujer se alejaba llorando. No pude contenerme y le pregunté lo que había pasado,  desconsolada me relató: Me dijo que hiciera lo que me diera la gana… Que él no tenía que aconsejar nada a nadie y que estaba allí para otras “cosas más importantes”.  

-Vaya, -exclamé. 

-Comprendes a lo que me refiero, tenía que ir sola, mayor, con miedo y pide ayuda a quién podría dársela, pero este está tan sobrepasado, que directamente la manda a la m...

Este es un ejemplo real de las causas reales que originan el mal y que siempre pasado un tiempo tratamos de olvidar y que nunca, nunca intentamos ponerle remedio. Así el problema sigue avanzando hasta que ya no hay vuelta atrás. 

¡Y no hemos aprendido nada! Lo peligroso de la soledad es que es el resultado, no el problema. 

-Está muy bien que haya levantado la voz Don Miguel desde Francia o desde España. 
También hablaron los canadienses y sus centros de mayores en donde nadie se hacia responsable. No llegaban ni mascarillas. En mayo de 2020. 

Y se manifestaron en Alemania, Bélgica, Noruega, Dinamarca y tantos otros con un alto nivel de vida por los ancianos abandonados por su sanidad en los asilos tanto públicos como privados. 

Las víctimas del Covid-19 y su soledad.  

A mí no me va a pasar 

Los asilos se volverán a llenar y los ancianos estarán solos. 
Cualquiera puede ser, cualquiera 



Nunca pensé que este momento llegaría. 



*Miguel Angel Martínez, pintor gallego. 

Comentarios

  1. Las noticias que me llegan a mi son todo lo contrario, amabilidad por parte de todos, enfermeros y médicos y demás personal. Siempre hay que saber escuchar pero en algunos lugares y a algunas personas hay que hacerlo con interés. Abrazo

    ResponderEliminar
  2. Me impresiona la frase lo peligroso de la Soledad es que es el resultado, no el problema. En ella está encerrado todo.
    Y nos terminará pasando a todos.
    Besisimos

    ResponderEliminar
  3. Por cierto, Don Miguel Ángel es un pintor extraordinario.

    ResponderEliminar
  4. Lo que piensa un médico, uno más:

    Lo que más ha dolido en todo el mundo son los ancianos aislados y encerrados en los centros.
    Lo que dolía es cuando llegaba el ejército y encontraban muertos y moribundos.
    Lo que más dolía es cuando los ingresaban y salían por la puerta de atrás sin haber podido ver a nadie querido.
    Lo que más dolía es que la mayoría de las víctimas fueron ellos.
    Lo mas dolían eran sus lágrimas pensando que eran las últimas.

    Lo que nos dolía a quién debíamos salvarlos es su tremenda indefension, su soledad por ley y con quienes se cebó la enfermedad.

    Pero es mejor no recordar. Lo pasado pisado.
    Ya se olvidó, porqué, porque nunca los han visto, porque no pudieron hablar con ellos por los protocolos de la OMS.

    Esa fue la realidad junto a la torre de marfil de los demás encerrados tres meses en sus casas.

    Pero ya pasó. Cuesta pensar que se haya aprendido algo cuando la memoria no retiene o inventa sucesos maravillosos.

    Cuando se habla de tragedia se dice cuántos de nuestros seres queridos perdimos. Eran casi todos... Ellos.

    Podía aprenderse para el futuro, pero eso nunca pasa.

    Qué mejor que los que pasamos sus últimos momentos.

    De los mayores de 65 que estaban en sus casas, solos o con sus familias o amigos unos pocos llegaron a las peores consecuencias no por el virus, sino por antecedentes de riesgo. Incluso las pocas víctimas menores
    Y casi todos sobrevivieron porque se sentían protegidos, porque tenían un hogar.
    Porque no estaban solos.

    A mí también me conmovió como a Moony lo que dice ese señor de la soledad. Y es un hecho y está confirmado por las cifras que cada vez hay más gente mayor sola. Y muchas plazas en los asilos.

    Y estamos hablando en general, no sólo España.

    Luz, qué "pedorata". :)

    ResponderEliminar
  5. Siguendo el hilo de Marcel, recuerdo que donde se producía la mayor cantidad de contagiados y muertos en Alemania eran los mataderos.

    Varios científicos tratando de explicar ese fenómeno, coincidieron que la atmósfera general de esos lugares estaba compuesta por ansiedad, miedo, muerte, lucha, tristeza, esa suma de factores incidían en el personal que respiraba o inspiraba inconscientemente ese micro clima y daba como resultado que bajaran las defensas. Siempre es donde se registraban más casos de gripe o de otros virus.

    Otros decían de la falta de higiene, no pegaba porque precisamente eran los más esterilizados aparte de los hospitales donde también hay una atmósfera similar: ansiedad, miedo, muerte, lucha con la diferencia de la atención y medicación.

    Y por supuesto arrasó en los centros de ancianos donde aparentemente no recibieron los cuidados necesarios y no por la responsabilidad de los centros, sino por el protocolo como dice Marcel. Fue lo más trágico y real.

    La vacunación es un caos, en Munich, ni contar.  En NY me consta que lo hacen en cualquier comercio. Y en China ni idea, porque siempre vacunan contra el corona. De Rusia poco se sabe. No tengo mucha información de Latinoamerica, pero tiene que ser en algunos países terrorífico y además con tantos millones de habitantes: Brasil, México, Perú, Colombia. Cómo se puede controlar todo eso...
    Los Países árabes supongo que la cosa va mejor, son super limpios, cuidadosos, excelentes profesionales y pocos casos.
    Japón se me ha escapado.

    En fin un tema muy incómodo de tratar donde cada uno vivió su propio drama. Y continuará la incertidumbre hasta comprobar con el tiempo los efectos de la vacuna experimental.

    Luz, vaya rollos te estamos poniendo.
    Y todo empezó con un simple buenos días. ¿Es habitual que te encuentres con estos personajes?
    Si es así, como para aburrirte.
    Un Kuss

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajaja, Marcel, qué sutil: "siguiendo el hilo de Marcel ", "el protocolo como dice Marcel".
      Mira que eres... Así que siguiendo el hilo de los mataderos...

      Eliminar
  6. Quiero dar las gracias a todos por sus opiniones personales en algo tan grave que le ha tocado vivir a la humanidad.
    Cada uno tiene su perspectiva como debe ser porque todo ha sido completamente nuevo.
    No creo que alguien lea, pero para mí es enriquecedor y todo lo que habéis puesto, luego lo comento con mi familia, amigos, compañeros.
    De verdad, muchas gracias.

    ResponderEliminar
  7. Vaya, estaba pensando ahora releyéndolos, qué lujo:

    Ester (no sé su profesión, pero es sabía), una bióloga española, un médico suizo, un químico alemán.
    Qué reparto... :))

    Aunque lo más importante es lo que los distingue como personas, incluyendo a los que han pasado por este blog humilde dejando sus pensamientos y emociones.
    (Y no es peloteo, sino agradecimiento por dejar algo de su tiempo para compartir.)

    ResponderEliminar
  8. Oh, entré para agregar a nivel periodismo todo lo que desencadenó la declaración a mediados de 2019 del FMI, en que manifestaba su preocupación por el crecimiento constante de la población vieja en Europa y que había que buscar una solución urgente...

    Pero creo que no es el momento oportuno y me quedo con todo lo que hay aquí desde el "buenos días".

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajaja y llegó la prensa.
      Ese comunicado fue alucinante.
      Pero el FMI es una máquina económica.

      Eliminar
  9. Hablo ya con algunos años encima y, quizás por eso, me equivoque al decirlo, pero creo que el individualismo feroz ha ganado la partida. No creo que hace unos años todo fuese compartir y ayudar al prójimo, pero hemos perdido la sensación de pertenencia a un colectivo, a una clase social. Todo se ha convertido en un sálvese quién pueda y en culpar a las víctimas de su situación.

    Asusta, la verdad.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Creo que sí también. Es que somos un mundo cada uno, una suma de individuos que luchan por sobrevivir e intentamos sumar para adquirir fuerza. Pienso que quizás por eso al amor era para los griegos la fuerza del universo.
      De ahí que lo que más nos une sea esa fuerza. Por poner un ejemplo, los hijos o la descendencia. Es tan potente la unión que es como parte de uno mismo. Y al amar a otro es como si los átomos que rodean a cada uno se unieran.
      No sé si me explico la verdad...
      Lo demás, la sociedad es una lucha continua por seguir o adquirir un espacio. Algo así... :)

      Eliminar
    2. Jo, pero no te desiluciones, también hay quien sufre por los demás y que quiere ayudar y no solo a otras personas sino la vida toda.
      Lo que pasa que los medios, que manipulan las grandes fortunas nos bombardean con lo malo para que abandonemos, para que nos sintamos solos y sin refuerzos.
      ¿No crees?

      Eliminar

Publicar un comentario