El compromiso
Contaba mi bisabuelo que allá por los años 30, Alis Browns de Chicago que trabajaba en la compañía de seguros Goldman & Levin se había comprometido con el sobrino de los Goldman, Edward, quien decidió organizar una fiesta sorpresa para su cumpleaños en la mansión con los amigos y clientes más importantes.
Sobre las 7 de la tarde, cuando la oyen llegar, todos se esconden, pero ella sube rápidamente las escaleras para darse una ducha.
Antes de salir del baño repara que con el apuro había dejado el neceser y contrariada va hacia las escaleras.
Y oh, allí abajo, un coro de voces gritando "¡sorpresa!", la deja petrificada.
No menos fuerte fue la reacción del grupo que atónito observaba el cuerpo desnudo con mantequilla de cacahuete en los pezones y entrepierna.
Alis desesperada vuelve al baño, se viste y sale huyendo de allí.
Renunció a su trabajo, dejó Chicago y nunca más se supo de ella.
Sobre las 7 de la tarde, cuando la oyen llegar, todos se esconden, pero ella sube rápidamente las escaleras para darse una ducha.
Antes de salir del baño repara que con el apuro había dejado el neceser y contrariada va hacia las escaleras.
Y oh, allí abajo, un coro de voces gritando "¡sorpresa!", la deja petrificada.
No menos fuerte fue la reacción del grupo que atónito observaba el cuerpo desnudo con mantequilla de cacahuete en los pezones y entrepierna.
Alis desesperada vuelve al baño, se viste y sale huyendo de allí.
Renunció a su trabajo, dejó Chicago y nunca más se supo de ella.
Edward rompió el compromiso.
Historias parecidas sin nombres se fueron publicando en distintos periódicos en el contexto de los años 30, "años locos", pero cuya revolución solo se desarrolló en la moda femenina. El profesor Bill Ellis se manifestó aclarando que, "la historia pretende ser moralizante, una especie de llamada de atención para las mujeres que no se ajustan a la norma".
Leyendas urbanas, tema propuesto por el Tintero de oro.
¡Vaya una historia! Gracias por compartir tantas y tantas cosas, datos interesantes. Gracias. 🌹
ResponderEliminarSe contaron muchas distintas donde coincide el dato de la mantequilla de cacahuete. :)
EliminarGracias a ti Maty. 💜
Años 30, creo que la reacción en estos años que nos han tocado habría sido la misma. ¡Menuda sorpresa! Abrazos
ResponderEliminarNo creo, es cierto que se está retrocediendo a épocas oscuras, pero no tanto... Aunque la sorpresa seguro es la misma. :)
EliminarAbrazos
¡Hola, Luz! Me impactó especialmente el epílogo del final de la leyenda, donde a juicio del profesor Bill Ellis, se manifiesta que la historia pretende ser moralizante.
ResponderEliminarBuen aporte, compañera.
Oh Tara, también leí el tuyo sobre chupacabra. Una versión diferente, original y con sorpresa.
EliminarY gracias compañera :)
Una buena leyenda urbana , lo que no me queda muy claro es porque ella llevaba la mantequilla en sendos lugares, . Un besote y bienvenida la iniciativa.
ResponderEliminarAy, la mantequilla de cacahuete es un totem en usa y bueno es para comer... 😉
EliminarUn besote
Lo de la mantequilla de cacahuete raro, pero muchísimo más raro lo que dijo el profesor Bill Ellis que se manifestó aclarando que, "la historia pretende ser moralizante, una especie de llamada de atención para las mujeres que no se ajustan a la norma".
ResponderEliminarA qué norma? A la suya?
Besisimos
Bueno, tan raro eso no es 😀
EliminarY respecto a la moral que plantea... Si una mujer occidental no votaba, no tenía alma, no tenía derecho sobre su fortuna, etc. Es lógico. Hay tantos culturas que ahora son así e incluso peores. Y cuidado porque las sociedad va por ondas.
Besísimos
Leer he leído... y ahora qué hago? Pues ya sabes que no soy de estos eventos... Pero bueno, por una vez y tratándose de tu blog... Mi pregunta:
ResponderEliminar¿Había algún destinatario para la mantequilla de cacahuete?
Abrazos Luz.
Ya te expliqué Ernesto, para mí no son eventos ni siquiera concurso. A veces es el tema que me atrae o un reto a ver que puedo descubrir.
Eliminar¿Has tenido alguna mala experiencia? Supongo que hay de todo.
El destinatario... en un mundo prohibido, vete a saber qué tentaciones hay :)
Abrazos y contenta de verte.
Ninguna mala experiencia en universo que no he frecuentado nunca.
EliminarSobre tentaciones prohibidas... Universos naturales al alcance de la mano. Para quienes tuvieron el arte de alargarlas al encuentro de las otras.
Satisfacción compartida Luz.
El puto patriarcado es muy antiguo. Bill dijo una verdad muy actual.
ResponderEliminarUf, parece que primero fue el matriarcado y en cuanto se midieron las fuerzas y el gran tótem, zas.
Eliminar¿Y no fue a buscarla Edward? Una mujer que se arregla para uno, no se la puede abandonar a las primeras de cambio.
ResponderEliminarUn saludo.
Supongo que en aquellos años 30, el sería el primer avergonzado y el que dio el primer paso para que desapareciera por más tentadora que fuera la oferta. :)
EliminarUn saludo y bienvenido. También leí tu relato, buenísimo
Es lo que tiene querer dar sorpresas, que acabas siendo el sorprendido. Lo de la moral ha avanzado poco de los años 30 a principios del s.XXI, y lo de la doble moral se mantiene igual también. Saludos!
ResponderEliminarTú también piensas que no es diferente ahora, qué curioso. Saludos Mayte.
EliminarHola Luz , un buen micro , lastima que saliese huyendo
ResponderEliminartoda avergonzada , saludos de flor.
Yo creo que con las costumbres y moral de la época no le quedó otra.
EliminarSaludos Flor
Una leyenda urbana en toda regla. Muy buen aporte para el reto. Saludos.
ResponderEliminarJajaja, eso sí...
EliminarSaludos Ana.
¡Hola, Luz! Lo primero es agradecerte que compartas tus letras en este reto creativo. Nos aportas una leyenda clásica, pero te aseguro que no sabía que sus orígenes fueran tan lejanos, nada menos que los años 30. Yo la descubrí adaptada a un programa de televisión en España en el que al parecer existía un vídeo en el que además estaba implicado Ricky Martin. En ese caso, el destinatario de tan "sabrosa" crema era el perro de la dueña.
ResponderEliminarMe ha gustado como la has narrado, y también el contexto en el que la has situado y que como bien mencionas, su intención es moralizante, como en todas las leyendas. ¡Ay, la moral dominante! Cuántas víctimas deja a su paso, incluso hoy día. Saludos!
Vaya David, ya quería agradecerte semejante obra bloguera que has asumido. Una historia larga que fue dando sus frutos y ha reunido grandes escritores de relatos incluido tú.
EliminarEsta vez leyendo Josep y Norte sentí curiosidad sobre este encuentro y el tema me atrapó y bueno eso...
Esta leyenda tiene tantas versiones, pero en todas las que he leído no cambia el morbo de la mantequilla.
Tampoco sabía nada de esa implicación, mira qué es rara.
En fin, muchas gracias por todo y por incluirme.
Saludos!
Las prisas suelen dar muchas sorpresas, pero esta se lleva la palma.
ResponderEliminarSaludos.
Jajaja Josep, pues tú eres el responsable de este relato, siempre sigo tus actualizaciones, el del perro me encantó y me tentó. Vaya lío:)
EliminarSaludos.
Bueno, pero ya viste lo que le pasó Marilyn treinta después...
ResponderEliminarTodo depende de la perspectiva.
Y las personas como ese Bill están en todas las civilizaciones.
Feliz domingo.
Curiosa historia, desde luego.
ResponderEliminarGracias por contárnosla.
Saludos.
Sin leyendas antiguas que van cambiando la versión.
EliminarSaludos
¡Ay, las mujeres y la norma! O vírgenes o putas, ya se sabe...lo triste es que algunas mentalidades no han cambiado en casi un siglo que hace ya de esta historia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Uf, parece muy difícil lo que es el cambio, cambio. Esta leyenda está encuadrado en "los años locos" y aunque el cine de Hollywood lo popularizó, era y fue siempre la cuna del machismo. Por ej. Groucho Marx tan admirado por sus frases celebres, ese humor representa al machismo. Y así siempre ¿Por qué? No tengo la menor idea o sí, pero es largo...
EliminarUn abrazo.
Ahí se estuvo a punto de descubrir algún secreto...... jejeje.... pero los invitados,no llegaron a saber cual !.
ResponderEliminarMuy bueno !! ;)
Jajaja, qué chasco...
EliminarSaludos artur.
Los quiero invitar a una convocatoria de relatos cortos, que espero quieran participar. Un ejercicio de fantasía con un personaje con el que tendrán que interactuar. convocatoria libre a su estilo.
ResponderEliminarhttps://adoquines-mojados.blogspot.com/2021/11/convocatoria-libre-mi-historia-con-un.html
Pueden colocar en comentarios el link de su historia.
Gustab.
Huy lo que pretendes es complicado porque habría que conocer a Gustab para interactuar y él me da a mí que no desea hacerse "ver" y nunca sabes si es Gustab o su alter ego.
EliminarUf, qué difícil...
La moraleja es que las damas de alta alcurnia,no deben olvidarse el neceser.
ResponderEliminarAbrazoo Luz
Ella no era de alta alcurnia sino una trabajadora de la empresa... Esas eran las que no debían olvidar el nececer según la censura.
EliminarAbrazo
Qué leyenda más tortuosa, nunca había leído nada sobre eso.
ResponderEliminarY los censuradores con su moralidad enfermiza, eso me suena.
Para mí también, muy tortuosa todo para dar clase de moralidad enfermiza como dices.
EliminarHola, Luz. La hipocresía que siempre nos acompaña. Lo hizo en el pasado y seguirá con nosotros en el futuro. Así nos va. Buen aporte al reto. Un saludo.
ResponderEliminarCierto Pedro, es increíble el mal que han hecho y siguen haciendo.
EliminarUn saludo y bienvenido.
Hola, Luz. Muy buena leyenda la que nos traes. Se ve que las historias con mantequilla de cacahuete o similares y da para mucho. ¿Moralidad o hipocresía? Hay está el quid de la cuestión.
ResponderEliminarUn saludo.
Bueno lo de la mantequilla también se ha hecho con bastante desperpajo y con lo más inverosímil...
EliminarPara mí las dos cosas. Un saludo
Una leyenda muy conocida que has contextualizado muy bien. Tampoco yo sabía que su origen se remontaba a los años treinta ni que en su origen había una intención moralizante. Me ha gustado mucho leerte, Luz.
ResponderEliminarPues así parece, es que al final nada es nuevo cuando indagas y la clave en esa época fue sí la intención moralizante.
EliminarMe satisface que te haya gustado siendo tan gran escritora.
Hola Luz, esta si que ha sido genial, menudo compromiso, y caray qué trance tan desagradable para esa pobre mujer.
ResponderEliminarLa verdad es que desconocía esas leyendas sobre la mantequilla de maní, y mira que soy casi adicta a ella, ja, ja, además de lo sabrosa y nutritiva, es excelente para el estreñimiento, pero ese uso no lo conocía hasta este reto de David.
Muy bien logrado el escenario de la historia. Grata semana.
Jajaja me encanta lo que dices, es que mira que es rica esa mantequilla, lo que no sabía que era buena para el estreñimiento. Vaya, algo nuevo para mí.
EliminarMuchas gracias por comentar y bienvenida
Hola, Luz. Ahora me explico porque en USA hay tantos alérgicos a los cacahuetes y no diferencio géneros. 😁Ahora que lo de moralizante me parece también muy de doble rasero, en ese tipo de juegos lo normal es que se haga por parejas y aquí solo se lleva la sorpresa la chica. Bueno, allá ellos y sus prejuicios morales que no violentos. Todavía me acuerdo de la serie de Walker Ranger de Texas donde lo normal es que hubieran tiroteos y al menos dos muertos por episodio y solo estaba clasificada para mayores de siete años. Saludos 🖐🏼
ResponderEliminarJajaja, no sabía que había tantos alérgicos a los cacahuetes allá, pero parece que la mantequilla además de ser la comida nacional junto al pavo de Acción de Gracia si producía algunas alergias en los moralistas :))
EliminarPor supuesto, las armas, los tiroteos, son sagrados y parte de la enseñanza...
Muchas gracias por el humor y la ironía Vanjav.
Hola Luz. Una versión diferente de un clásico que ha ido perdurando y adaptándose al paso de los años, sin perder actualidad. Y es que las pasiones no dependen de la época, han estado y estarán siempre ahí. Un saludo.
ResponderEliminarCierto no solo se da en las leyendas, cuando lees historias antiguas, novelas o cuentos de siglos atrás ves que nada ha cambiado al respecto.
EliminarUn saludo
A veces cuando intentamos dar una sorpresa nos acabamos sorprendiendo sin quererlo. La moral imperante, debería ser de cada cual e intransferible, y aplicarse a uno mismo en exclusiva. El mundo sería más bello inundado por una diversidad galáctica de morales intransferibles. Muy buen relato. Me ha gustado.
ResponderEliminarUn abrazo.
Si, hay que tener cuidado con las sorpresas :)
EliminarSon tantas las cosas que cambiarían el mundo pero es así...
Un abrazo Carles
Hola, Luz, no conocía de la leyenda, pero has elaborado una bien amena, en la que la sorpresa es tremenda y deja con ganas de saber más. El toque de la mantequilla ha estado genial.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Saludos.
Son tantas la leyendas, como para conocerlas todas y eso es lo bueno :)
EliminarEn todas versiones salía la mantequilla.
Un placer también.
Saludos
Quién habrá disfrutado del cacahuete.????..o al parecer no lo disfrutó. Yo no habría dejado rastro ni en los pezones... menos aún en la entrepierna. Habrían tenido que ser muy observadores, y verla de muy cerca. Que combinación explosiva, dos sabores para degustar con tranquilidad. Ella debe ser una mujer de fuego por la pasión, y en el horóscopo, de agua. Escorpión con ascendente sagitario.
ResponderEliminarWow, crema cacahuete.....
Gustab, delirante y pensativo.